Mira cómo se mece una vez y otra vez, virgen de flor y rama, en el aire de ayer. (с)
Текст (неточный)Cuando llegaste al mundo y abriste los ojos aún sin ver bajo la noche húmeda de Praga. Cuando tú dabas tus primeros pasos y te asomabas al arcoiris dulce de tu alma yo andaba enamorando el aire, trazando un mapa de pájaros y arañas en esa tierra donde se pierde el ojo en horizontes como un abismo de agua. Tábanos, avispas en un verano seco como un cardo, aroma de las flores, las simprevivas que están raspando el aire.
Cuando aprendiste a deletrear tu idioma de cristal como una fuente de agua y comenzaba a deslumbrar el aire de los molinos en el Parque de Kampa, yo aprendía el canto de la tórtola, la voz de las zarzamoras, gritaba en un idioma de indios frente a la mar que quiere devorarte. Tierra, horizonte, juguete del cristal del terremoto, huye, élitro, al viento espeso cuarteado por las sales.
Cuando en el rostro te floreció la boca como fruta de amores o pétalo de miel y florecías, tu cuerpo entraba al mundo, tus manos dibujaban los signos del encuentro. Yo andaba entre banderas acumulando amor, mi pueblo en la miseria y flor del mundo por eso campesina, yo sin tierra ni horizonte, sí el aire del mar o la montaña.
Canto, canto, te enseño mi país que aún no conozco. Pueblo, nieve, el lago como espejo de los dioses.
En el vídeo aparecen imágenes de Praga y de Valparaíso, ciudades respectivas de Viera Boródnova y Osvaldo Rodríguez.